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sábado, 2 de mayo de 2020

"Bienvenida la designación de Luis José Rueda, a la más alta dignidad de la Iglesia Católica en Colombia"



Monseñor Rueda y el faltante de la Iglesia Católica

Por Emerson Grajales Usma*


Antes de redactar estas líneas, hice varias consultas con amigos payaneses que tuvieron -y tienen- de alguna manera, contacto con el Arzobispo de Popayán Monseñor Luis Rueda Aparicio; y me manifestaron su desazón ante la determinación de Su Santidad el Papa Francisco, de nombrarlo como Arzobispo de Bogotá en reemplazo del también alto prelado de la Iglesia Católica Rubén Salazar Gómez.

Y me decían “desazón”, por las subrayadas obras que dejará Monseñor Rueda y los enormes registros sociales que culminó y los que emprendió en favor de la sociedad como resultado de su purificada obra Pastoral. Esa misma tristeza, se refleja desde este fin de semana en la capital de la República, ante el anuncio del retiro del alto Pastor de la Iglesia Rubén Salazar Gómez. Pues muy a pesar de que Salazar había renunciado a tan alta dignidad Eclesiástica, por su edad, también es verdad que su ausencia, resignará un enorme vacío pero en contraste,  deja más en firme la conexión de la Iglesia Católica a través de sus pastores con los feligreses.

El designado Monseñor Luis Rueda, llega en un momento cuando la Iglesia Católica en Bogotá, se encuentra en la cima, gracias a la actividad pastoral de Rubén Salazar. Gran desafío para que el propuesto Pastor la mantenga en su cúspide.

Pero si es muy contradictorio y curioso, que desde Roma se conserve en la Iglesia de Cali, al Regidor del catolicismo más cuestionado por sus sospechosos acercamientos con grupos narcoterroristas como lo son las Farc.

Para nadie, en nuestro país por lo menos, es un secreto que “Monseñor” Darío Monsalve, ha mostrado extraña solidaridad con grupos al margen de la ley. Por eso, cuando a finales de octubre de 2016, salió imprevistamente a los medios de comunicación a decir que el grupo terrorista Eln ya tenía listo los protocolos para la liberación del ex congresista chocoano Odín Sánchez; no extrañó en lo más mínimo pese a los estériles esfuerzos del gobierno nacional por entrar en contacto con el grupo armado.

Hoy, sigue rondando la pregunta si el Arzobispo de Cali, tuvo alguna injerencia en el saldado rescate de la familia Sánchez con el grupo armado del Eln, caterva a la que le entregaron más de mil millones de pesos por su liberación. También “Monseñor” Monsalve, deja un fuerte tufillo por su extraña critica al gobierno nacional por la solicitud que el entonces Canciller Carlos Holmes Trujillo, le hizo a Cuba para que entregara a los cabecillas del Eln que cobardemente siguen escondidos en esa Isla, a través de una columna publicada en Colombiaplural, página de la Universidad Claretiana.

Considero que la Iglesia Católica desde su máxima autoridad como lo es el Papa Francisco, debiera tomar medidas cautelares y separar del cargo a su representante en Cali Darío Monsalve, si quiere continuar demostrando que el interés desde Roma, es depurar los males que aquejan el conglomerado católico partiendo desde las aberrantes prácticas de sus pastores en el mundo, prácticas que colindan hasta con la pederastia en menores o adolecentes del mismo sexo y, ahí sí, mostrarla como una Iglesia impoluta.

Bienvenida la designación de Luis José Rueda, a la más alta dignidad de la Iglesia Católica en Colombia, pero con lo ya expuesto por mí en esta columna con su represente en Cali, el Papa envía el triste mensaje de un faltante en una de las más urgidas determinaciones desde Roma con los feligreses de nuestro país.

*Asesor y consultor

Twitter: @Grajalesluise

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